Uruguay tiene antecedentes productivos en materia olivícola, con un gran potencial para su desarrollo:
* El país se encuentra dentro de la latitud sur análoga a la principal zona de producción del mundo: la cuenca del Mediterráneo. Se acepta internacionalmente que el olivo se puede desarrollar entre los paralelos 33º y 42º.
* El agua es un factor crítico en el desarrollo de la planta y su productividad. Si bien el exceso es perjudicial, la disponibilidad de agua que presenta Uruguay ( 1.100 mm/ año de promedio) asegura un crecimiento mayor a la de la cuenca mediterránea (sin riego).
* Si bien no todos los suelos del Uruguay son aptos, encontramos áreas con terrenos adecuados en todos los departamentos. Los suelos arenosos, pedregosos o pobres (con buen drenaje) que en general son de baja productividad para la ganadería y no aptos para la agricultura, suelen ser indicados para el cultivo del olivo.
* El manejo del olivo requiere prácticas culturales sencillas, fácilmente asimilables por la mano de obra disponible. Es un cultivo que se incorpora sin inconvenientes a las actividades agropecuarias tradicionales del Uruguay.
* Los costos de la tierra y de manutención son relativamente bajos comparados con los valores internacionales en áreas de producción con condiciones similares.
* El país ofrece estabilidad política-económica de forma que no cambien de manera significativa las condiciones de la inversión realizada, tratándose de un cultivo a largo plazo.
* La producción agrícola nacional presenta condiciones favorables desde el punto de vista impositivo.
* Tanto por cercanía como por acuerdos comerciales, Uruguay ofrece un acceso privilegiado a los grandes mercados importadores como Brasil, Estados Unidos y Canadá.
*En la última década, el aceite uruguayo ha obtenido premios a nivel internacional y ha ganado espacios por la excelencia de sus aceites de Oliva Virgen Extra en los mercados más exigentes.
*Buena rentabilidad, y una práctica agrícola que no presenta problemas con el medio ambiente, hacen de la olivicultura un sector muy atractivo para inversores de todos los orígenes. Los olivos son una opción de inversión y exportación que ya está sólidamente instalada y viene creciendo en Uruguay.
* Se ha profesionalizado su plantación y aumentan las almazaras que procesan las olivas y se empieza a exportar con buen suceso.
* A la fecha ya son 10.000 hectáreas las plantadas. Poco si se compara con las 16 millones de hectáreas disponibles en Uruguay. Pero, al mismo tiempo, es mucho territorio, considerando que se trata de una producción joven en esta nueva etapa (con plantaciones de 2003 a la fecha).
*Así está la olivicultura en el país, en un constante crecimiento, tanto en cantidad, calidad y prestigio.
* El LATU ha sido reconocido cómo Laboratorio idóneo para los análisis físico/químicos que demandan las autoridades de Brasil a la par que el Comité Oleícola Internacional ha aprobado el Panel Sensorial de la Facultad de Química para los análisis obligatorios para las diferentes categorizaciones.